
La columna vertebral es una estructura compleja y vital que soporta nuestro cuerpo y protege la médula espinal. Entre cada vértebra se encuentran los discos intervertebrales, que actúan como amortiguadores y permiten el movimiento. Sin embargo, cuando uno de estos discos se desplaza o se rompe, puede provocar una hernia discal, causando dolor y otros síntomas que afectan la calidad de vida.
¡En este artículo te explicamos más sobre el tema!
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¿Qué es una hernia de disco?
Una hernia de disco ocurre cuando el núcleo gelatinoso del disco intervertebral se desplaza a través de una fisura en su capa externa. Este desplazamiento puede presionar los nervios cercanos, provocando dolor, entumecimiento o debilidad en las extremidades. Las hernias discales son más comunes en la región lumbar y cervical de la columna.
Aunque los síntomas pueden variar según la ubicación de la hernia estos son lo que comúnmente se presentan:
- Región lumbar (parte baja de la espalda): Dolor que se irradia hacia los glúteos, piernas y pies, conocido como ciática.
- Región cervical (cuello): Dolor que se extiende a los hombros, brazos y manos.
Además del dolor, pueden presentarse entumecimiento, hormigueo o debilidad muscular en las áreas afectadas.
Causas y factores de riesgo
Las hernias discales pueden ser resultado del envejecimiento, ya que los discos pierden flexibilidad y se vuelven más propensos a desgarrarse. Otros factores incluyen:
- Levantamiento inadecuado de objetos pesados
- Movimientos repetitivos o torsiones bruscas
- Sobrepeso
- Estilo de vida sedentario
- Tabaquismo

Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico se basa en la historia clínica, examen físico y, en algunos casos, estudios de imagen como resonancia magnética o tomografía computarizada.
El tratamiento inicial suele ser conservador e incluye:
- Reposo relativo y modificación de actividades
- Medicamentos analgésicos y antiinflamatorios
- Terapias físicas como ejercicios de fortalecimiento y estiramiento
- Aplicación de calor o frío para aliviar el dolor
Si los síntomas persisten o empeoran, se pueden considerar tratamientos más invasivos, como inyecciones epidurales o cirugía .
Prevención y cuidado
Para reducir el riesgo de desarrollar una hernia de disco:
- Mantén una postura adecuada al sentarte y al levantar objetos
- Realiza ejercicios regularmente para fortalecer los músculos de la espalda y el abdomen
- Evita el sobrepeso y el tabaquismo
- Incorpora pausas activas si trabajas muchas horas sentado
La hernia de disco es una afección común que puede afectar significativamente la calidad de vida. Un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado son fundamentales para aliviar los síntomas y prevenir complicaciones. Si experimentas dolor persistente en la espalda o el cuello, consulta a un profesional de la salud para una evaluación completa.
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