El avance del procesamiento de nuestro lenguaje con la inteligencia artificial ha creado una creciente mejora en distintas áreas, que va desde la creación de contenido hasta la asistencia virtual.
En el panorama moderno, el acceso a la información rápida ha sido liderada por Google, siendo un buscador indiscutiblemente de excelencia para millones de usuarios en el mundo, sin embargo, los constantes cambios tecnológicos han creado un cuestionamiento importante, ¿Está ChatGPT reemplazando a Google como principal fuente de información?
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Para comprender hay que dejar en claro cuál es la función de cada una de ellas. ChatGPT es un desarrollado por la OpenAI, es un modelo de inteligencia artificial diseñado para entender y generar textos de manera coherente y relevante a partir de la pregunta que realice el usuario, la respuesta se va generando en cuestión de segundos.
Su formato de interacción está presentado para que las respuestas que este genere sean de una forma más humana y natural, respondiendo preguntas claras, de manera sintetizada para que sean totalmente comprendidas por el usuario.
La diferencia con Google es que este, es un motor de búsqueda que realiza una exploración de información organizada disponible en toda la web. Su fortaleza es que puede recuperar información relevante a partir de las consultas de los usuarios.
En los resultados de búsqueda de Google se requieren de una navegación más profunda para descubrir una respuesta precisa de lo que se está buscando. Además, al ser una plataforma líder desde mucho tiempo atrás, cada vez va integrando actualizaciones en la información que se genera.
Si bien, ambas tienen la capacidad de sobresalir desde sus diferentes áreas; no obstante, resulta impreciso decir que ChatGPT ha remplazado a Google, pues cada una tiene diferentes maneras de funcionar. A diferencia de la idea que se tiene sobre una competencia entre ambas, estas tecnologías tienden a ser un complemento entre sí.
Google, hasta la fecha, sigue siendo una de las principales puertas de la información en línea. Los usuarios confían en la capacidad del navegador para encontrar miles de respuestas de forma rápida, a pesar de que la respuesta pueda requerir de un tiempo más por el proceso de búsqueda. Por otro lado, ChatGPT, a pesar de su forma rápida de generar respuestas, sigue siendo una herramienta que se encuentra limitada por su base de datos a la información más actualizada.
En conclusión, ChatGPT y Google son dos herramientas que lejos de ser competencia son complementarias, ambas representan una faceta diferente de la inteligencia artificial. El uso adecuado de ambas impulsan la evolución de la interacción de los usuarios con la tecnología, trayendo consigo experiencias más eficientes.